CÓDIGO DEONTOLÓGICO DE REIKI
El practicante de Reiki únicamente pondrá las manos, con o sin contacto sobre el paciente permitiendo que la energía fluya en la intensidad necesaria, sin hacer ningún tipo de masaje ni manipulación manual, ni aplicar ningún tipo de sustancia aceitosa o crema.
El practicante de Reiki no cuestionará ni aconsejará al paciente para que abandone el tratamiento médico, ni realizará bajo ningún concepto, cualquier tipo de diagnóstico.
Ante una molestia o dolor no diagnósticado, el practicante de Reiki recomendará al paciente que visite a un médico para que le efectúe un diagnóstico.
El practicante de Reiki dará al paciente todas las explicaciones necesarias sobre la técnica de Reiki para facilitar su comprensión y le resolverá cualquier duda o información errónea.
Bajo ningún concepto, el practicante de Reiki administrará fármacos ni suprimirá los administrados por un médico.
El paciente permanecerá vestido durante toda la terapia de Reiki.
En ningún momento el practicante de Reiki hará promesas de sanación al paciente.
La terapia de Reiki no se realizará bajo los efectos del alcohol, drogas o cualquier otro tipo de sustancias tóxicas, por parte del paciente ni del practicante de Reiki.
El practicante de Reiki no utilizará su condición de terapeuta para manipular emocionalmente al paciente, asimismo, se abstendrá de crear dependencias afectivas y/o monetarias con sus pacientes.
Se respetará, sin juzgar, cualquier opinión expresada por el paciente, el practicante de Reiki se mantendrá en una posición neutral.
El practicante de Reiki ejercitará su cometido de terapeuta sin ningún tipo de discriminación por raza, sexo, religión, opinión, edad, afiliación política, idioma, condición social y personal, orientación sexual, etc,… o cualquier otra condición y circunstancia.
El paciente tiene derecho a una total privacidad y confidencialidad por parte del practicante de Reiki, tanto sobre lo que ha expresado verbalmente como sobre lo que ha escrito durante el transcurso de la terapia.
Si durante el proceso terapéutico, el practicante de Reiki observa que el paciente no efectúa ninguna progresión, deberá comentárselo y, si fuera necesario, orientarlo hacia cualquier otro tipo de terapia.
El practicante de Reiki realizará la terapia como una práctica de amor y armonía, no forzará nunca a recibir la terapia, pidiendo siempre autorización a la persona o tutores de la misma.
El practicante de Reiki no dará opinión médica, ni psicológica así como tampoco diagnosticará ni dará ningún tipo de prescripción a menos que el practicante esté cualificado para ello.
El practicante de Reiki no hará comentarios negativos sobre otros terapeutas ni sobre otras técnicas terapéuticas ni modalidades incluyendo la medicino convencional.
El practicante ofrecerá un entorno seguro y limpio para los tratamientos de Reiki, y no ofrecerá tratamientos de Reiki a sus pacientes en lugares o bajo circunstancias que puedan comprometer o poner en peligro al propio terapeuta y al paciente. En caso de emergencia ofrecerá Reiki de forma discreta.
El practicante de Reiki deberá preguntar al paciente si hay alguna zona de su cuerpo que no quiera que sea tocada. Como regla fija, el practicante no pondrá nunca las manos sobre el pecho del cliente, sobre la zona genital o sobre aquellas zonas que el cliente haya indicado.
Cuando se hace terapia de Reiki o se enseña a un menor, deberá estar presente el padre y/o madre, o tutor/a.
El practicante de Reiki no incorporará ninguna otra modalidad en los tratamientos de Reiki a menos que haya sido pedido por el paciente.
Acepto su cumplimiento,
(Nombre y apellidos,firma y fecha)
El practicante de Reiki únicamente pondrá las manos, con o sin contacto sobre el paciente permitiendo que la energía fluya en la intensidad necesaria, sin hacer ningún tipo de masaje ni manipulación manual, ni aplicar ningún tipo de sustancia aceitosa o crema.
El practicante de Reiki no cuestionará ni aconsejará al paciente para que abandone el tratamiento médico, ni realizará bajo ningún concepto, cualquier tipo de diagnóstico.
Ante una molestia o dolor no diagnósticado, el practicante de Reiki recomendará al paciente que visite a un médico para que le efectúe un diagnóstico.
El practicante de Reiki dará al paciente todas las explicaciones necesarias sobre la técnica de Reiki para facilitar su comprensión y le resolverá cualquier duda o información errónea.
Bajo ningún concepto, el practicante de Reiki administrará fármacos ni suprimirá los administrados por un médico.
El paciente permanecerá vestido durante toda la terapia de Reiki.
En ningún momento el practicante de Reiki hará promesas de sanación al paciente.
La terapia de Reiki no se realizará bajo los efectos del alcohol, drogas o cualquier otro tipo de sustancias tóxicas, por parte del paciente ni del practicante de Reiki.
El practicante de Reiki no utilizará su condición de terapeuta para manipular emocionalmente al paciente, asimismo, se abstendrá de crear dependencias afectivas y/o monetarias con sus pacientes.
Se respetará, sin juzgar, cualquier opinión expresada por el paciente, el practicante de Reiki se mantendrá en una posición neutral.
El practicante de Reiki ejercitará su cometido de terapeuta sin ningún tipo de discriminación por raza, sexo, religión, opinión, edad, afiliación política, idioma, condición social y personal, orientación sexual, etc,… o cualquier otra condición y circunstancia.
El paciente tiene derecho a una total privacidad y confidencialidad por parte del practicante de Reiki, tanto sobre lo que ha expresado verbalmente como sobre lo que ha escrito durante el transcurso de la terapia.
Si durante el proceso terapéutico, el practicante de Reiki observa que el paciente no efectúa ninguna progresión, deberá comentárselo y, si fuera necesario, orientarlo hacia cualquier otro tipo de terapia.
El practicante de Reiki realizará la terapia como una práctica de amor y armonía, no forzará nunca a recibir la terapia, pidiendo siempre autorización a la persona o tutores de la misma.
El practicante de Reiki no dará opinión médica, ni psicológica así como tampoco diagnosticará ni dará ningún tipo de prescripción a menos que el practicante esté cualificado para ello.
El practicante de Reiki no hará comentarios negativos sobre otros terapeutas ni sobre otras técnicas terapéuticas ni modalidades incluyendo la medicino convencional.
El practicante ofrecerá un entorno seguro y limpio para los tratamientos de Reiki, y no ofrecerá tratamientos de Reiki a sus pacientes en lugares o bajo circunstancias que puedan comprometer o poner en peligro al propio terapeuta y al paciente. En caso de emergencia ofrecerá Reiki de forma discreta.
El practicante de Reiki deberá preguntar al paciente si hay alguna zona de su cuerpo que no quiera que sea tocada. Como regla fija, el practicante no pondrá nunca las manos sobre el pecho del cliente, sobre la zona genital o sobre aquellas zonas que el cliente haya indicado.
Cuando se hace terapia de Reiki o se enseña a un menor, deberá estar presente el padre y/o madre, o tutor/a.
El practicante de Reiki no incorporará ninguna otra modalidad en los tratamientos de Reiki a menos que haya sido pedido por el paciente.
Acepto su cumplimiento,
(Nombre y apellidos,firma y fecha)
No hay comentarios:
Publicar un comentario